lunes, 7 de abril de 2014

Capitán de un barco de botella

Por esa sonrisa, la tuya,
navego a la eterna deriva,
capitán de un barco de botella
encerrado en cristal de tus pupilas.

Cenando a la luz de la luna,
 llorando a los astros del cielo,
 yo alzo hoy bandera,
y la posó en el hueco de tu hoyuelos.

En la dulzura de tu carcajada
mi brújula perdió el norte.
 Por eso no tengo mas horizontes
 que la mar, mi mar salada.



  Miguel Molina Aguilera


domingo, 9 de marzo de 2014

Niebla

Me miraste fijamente
como si tus ojos hechizarme no  pudieran,
como si no fueran cadenas lo que arastro,
como si nuestros ojos no se conocieran.

Me miraste fijamente 
clavando en mi pecho plumas que hierven,
que escriben en mis venas
como si mi sangre no conociesen.

 Me miraste fijamente
como si el mar pudiera permanecer inmovil
a lo feroces vientos,
como si pudiera mi amor marcharse
y burlarse del tiempo.

 Me miraste fijamente.
No con ojos que miran  y callan
sino con ojos que gritan, 
que me clavan como espadas.

 y me miras
y me miras

 con tus ojos que me atrapan,
con tus negras pupilas.

Esos dos preciosos abujeros negros
que me tragan,
 que me aspiran.


 


jueves, 27 de febrero de 2014

Rayos de Luna

Querría comprenderte,
comprenderme tal vez,
El vació de mi pecho,
lo que queda de él

No es propio el jazmín de inviero,
no  es propio en la noche el sol crecer,
no es propio aferrarme al viento
pues consciente soy de que jamás lo tendré.

Querría comprenderte,
comprenderme tal vez,
el vació de mi pecho,
lo que queda de él.

No es propio el canto del ruiseñor en la mañana,
no es propio querer soñar con algo que me hace temer,
no es propio que quiera tenerte cerca
pues consciente soy de que jamás te tendré

Querría comprenderte,
comprenderme tal vez,
el vació de mi pecho,
lo que queda de él.




lunes, 20 de enero de 2014

Arraigados.

Duda el hombre su existencia,
el sabio de  lo que la realidad alcanza.

Duda la justicia del equilibrio en la balanza
que juzga al hombre que roba por supervivencia.

Duda el dogma de la ciencia,
el viento de su borroso destino.

Duda el amor de la apariencia 
como duda el viajero en el camino.

Pero ante la duda permanecen
raíces que en mi  alma crecen,

mi amor por tí,
eternamente vivo.


Miguel Molina Aguilera

jueves, 16 de enero de 2014

Mis primeros acordes

Pequeña princesa,
     te he escrito tatas veces...
de hecho,
a ti fue la primera que te escribí.
Esa eterna melodia
que se repite y repite en mi alma
la que afloró los primeros versos
la que hoy por mi escribe.
Fue  tuya.
La forjaste en tu ojos
a fuego lento, con tu ardiente mirar.
Y sin yo saberlo,
me la regalste, la hiciste mía,
un eterno amor ,
una eterna melodía.
La manta que nos cubrió aquella noche,
la noche en la que cada rincón brillaba.
hoy me tapa
o almenos
eso dicen mis sueños,
eso cuentan mis lágrimas.
Y te echo de menos.
Aun cuando te tuve
sabia que ya no estabas.
Y es que te miro y sueño
lo que quiero hacer y no hago.
Tan cerca de ti,
tan lejos de tus manos.
Pues si fuera por mi,
nada de esto habría pasado,
seguirias junto a mi
y nuestro tiempo no habría parado 
Un eterno amor,
 una eterna melodía.

 Miguel Molina Aguilera